Arcadi Espada sobre las supuestas entrevistas a Hitler



(Publicación de Arcadi Espada en El Mundo sobre las supuestas entrevistas a Hitler del corresponsal Javier Bueno y de Eugeni Xammar. Siempre he dudado de su autenticidad, ya que Hitler no concedía entrevistas fácilmente. Por aquella época, incluso era difícil fotografiar a Hitler. Las dudas de Arcadi Espada me parecen razonables).


Por la conmemoración del 75 aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial el periódico ABC rescata una entrevista con Hitler de un corresponsal en Alemania llamado Javier Bueno. No la conocía. Es de 1923, el año del Putsch de Múnich. Unos meses anterior a la célebre de Eugeni Xammar, que contó con la asistencia de Josep Pla. Bueno presenta a Hitler como una bestia ignorante y altiva.

Meses después Xammar hará lo mismo. Es probable que no quepa deducir plagio de ello. Mientras que en la de Abc no hay mención a los judíos, en la pieza de Xammar siempre ha llamado la atención la alusión a un genocidio. Una solución-final- que, por cierto, Hitler niega en la entrevista, no por inmoral, sino por poco práctica: «El mundo se me echaría encima». El nazi prefería la expulsión en masa, a la manera española. Las dudas sobre si Xammar y Pla conversaron realmente con Hitler las expuso el periodista Lluís Permanyer hará unos quince años.

Permanyer consideraba raro que ni Xammar ni Pla jamás la hubieran mencionado. Hablar con Hitler tuvo que haber sido inolvidable, especialmente si pasados los años el conversador se entregaba al sesgo retrospectivo. Mi opinión oscila cada vez que me topo con el asunto. La posición de Permanyer adquiere firmeza si se piensa en la dificultad de que hubieran podido olvidar la entrevista. i¿Olvidar?! No sé. Puede. iCosas de gigantes!

Por mi parte yo no olvido que en mi juventud entrevisté a Rafael Arias Salgado. En cualquier caso, es más fácil que los dos hubieran olvidado la entrevista -de habérsela inventado- que al propio Hitler -de haber hablado con él-. En el caso de Pla, además, las sospechas sobre algunos de sus trabajos no son insólitas. 

Hay también dudas, por ejemplo, de que conversara realmente con Simenon-cuando su exilio en Francia, en los años de la Guerra Civil-, a pesar de lo que se deduce del retrato de pasaporte que publicó del escritor belga. La posibilidad del fraude se debilita, sin embargo, cuando la afeitamos con Ockham. Si dicen que hicieron la entrevista, lo más sencillo es pensar que la hicieron. Sobre el olvido también hay disponible algo simple: no consta que nadie les preguntara nunca por Hitler. ¿Por qué iban a hacer mención de algo que no parecía interesar a nadie?

Arcadi Espada.

2 comentarios:

  1. Tan falsas sin esas entrevistas como la que dijo haber mantenido Ezquerra durante la batalla de Berlín. Ninguna se soltiene ante el más mínimo análisis lógico

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  2. Si. Mientras que la prensa si ha reparado en las falsedades de Ezquerra, estas entrevistas con Hitler las da por válidas.

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